Orígenes del Plato
La combinación de pollo, tomate y queso tiene una fuerte influencia de la cocina italiana, específicamente del pollo a la parmesana. Sin embargo, este platillo ha evolucionado en diversas culturas para adaptarse a los gustos locales. ¿Quieres explorar más recetas similares? Aprende cómo preparar un delicioso pollo en crema de cilantro, otra opción fácil y sabrosa.
Ingredientes Esenciales
El pollo con salsa de tomate y queso es una receta que destaca por la simplicidad de sus ingredientes, que juntos crean una combinación de sabores irresistibles. Aquí tienes todo lo que necesitas para preparar este delicioso platillo:
Ingredientes principales:
- Pechugas de pollo frescas: La base de la receta. Puedes optar por filetes finos para una cocción más rápida o piezas gruesas para mayor jugosidad.
- Salsa de tomate natural: Puedes usar tomate triturado, puré de tomate casero o una salsa prehecha de buena calidad. Los tomates frescos son ideales si buscas un sabor más natural.
- Queso mozzarella: Perfecto por su capacidad de derretirse y gratinarse de manera uniforme. También puedes mezclar con parmesano o provolone para un toque extra de sabor.
- Ajo y cebolla: Estos ingredientes básicos aportan profundidad y aroma a la salsa.
- Especias: Orégano, albahaca, pimienta y una pizca de sal son esenciales para realzar el sabor de la salsa.
Opcionales y personalizables:
- Quesos adicionales: Añade parmesano rallado o queso provolone para intensificar el sabor.
- Hierbas frescas: Perejil o albahaca picada para decorar y aportar un toque fresco al plato.
- Vino blanco: Un chorrito en la salsa de tomate puede agregar un matiz sofisticado.
- Aceitunas o alcaparras: Ideales para añadir un toque mediterráneo.
Consejos de selección:
- Usa pollo fresco y de buena calidad para garantizar un sabor óptimo.
- Opta por quesos con buena capacidad de gratinado para obtener un resultado visualmente atractivo y delicioso.
Con estos ingredientes básicos, ¡estás listo para empezar a cocinar el mejor pollo con salsa de tomate y queso!
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Receta Básica Paso a Paso
Preparar el pollo con salsa de tomate y queso es sencillo y rápido, lo que lo convierte en una receta ideal para cualquier ocasión. A continuación, te presentamos los pasos detallados para lograr un plato delicioso y gratinado a la perfección.
Ingredientes (para 4 personas):
- 4 filetes de pechuga de pollo
- 2 tazas de salsa de tomate natural
- 1 taza de queso mozzarella rallado
- 2 dientes de ajo picados
- 1 cebolla mediana picada
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
- 1 cucharadita de orégano seco
- 1 cucharadita de albahaca seca
Instrucciones:
- Preparar las pechugas de pollo:
- Limpia y seca las pechugas de pollo.
- Sazónalas con sal, pimienta y orégano.
- Sellar el pollo:
- Calienta el aceite de oliva en una sartén grande.
- Dora las pechugas por ambos lados a fuego medio-alto, aproximadamente 3 minutos por lado. Retíralas y resérvalas.
- Preparar la salsa de tomate:
- En la misma sartén, añade un poco más de aceite si es necesario y sofríe el ajo y la cebolla hasta que estén dorados.
- Agrega la salsa de tomate y sazona con sal, pimienta y albahaca. Cocina a fuego lento durante 10 minutos, removiendo ocasionalmente.
- Montar el plato:
- Precalienta el horno a 180 °C.
- Coloca las pechugas de pollo en una fuente para horno.
- Cúbrelas con la salsa de tomate y una capa generosa de queso mozzarella.
- Hornear:
- Hornea durante 15-20 minutos, o hasta que el queso esté completamente derretido y gratinado.
- Servir:
- Decora con hojas de albahaca fresca o perejil picado. Sirve caliente acompañado de pasta, arroz o ensalada.
Consejo final:
Para un gratinado perfecto, coloca la fuente en la parte superior del horno durante los últimos 5 minutos. ¡Disfruta de este delicioso pollo con salsa de tomate y queso!
Variantes Populares
El pollo con salsa de tomate y queso es una receta muy versátil que se adapta a diferentes gustos y estilos de cocina. Aquí te presentamos algunas de las variantes más populares que puedes probar en casa:
1. Pollo a la Parmesana
Esta variante es un clásico de la cocina italiana que incluye una capa crujiente:
- Preparación: Empaniza las pechugas de pollo con pan rallado mezclado con queso parmesano y hierbas.
- Cocción: Fríe ligeramente el pollo antes de cubrirlo con salsa de tomate y queso.
- Resultado: Una textura crujiente por fuera y jugosa por dentro.
2. Pechugas Rellenas de Queso y Tomate
Para una presentación más sofisticada:
- Preparación: Haz un corte en las pechugas y rellénalas con queso mozzarella y tomate seco.
- Cocción: Ásalas en una sartén o al horno y cúbrelas con más salsa de tomate y queso para gratinar.
- Tip: Puedes añadir espinaca o champiñones al relleno para un toque extra.
3. Pollo Gratinado con Variantes de Queso
Experimenta con diferentes tipos de queso:
- Opciones: Prueba provolone, gouda o incluso un toque de queso azul.
- Cocción: Sigue la receta básica, pero combina quesos para un gratinado único y sabroso.
4. Versión Baja en Calorías
Si buscas una opción más ligera:
- Cambios: Usa queso bajo en grasa y opta por una salsa de tomate casera sin azúcar.
- Cocción: Hornea el pollo sin necesidad de sellarlo en aceite.
5. Pollo con Salsa Picante
Para los amantes del picante:
- Preparación: Añade chile o pimientos picantes a la salsa de tomate.
- Acompañamiento: Sirve con arroz blanco o tortillas para un estilo Tex-Mex.
Acompañamientos y Maridaje
Acompañamientos Ideales:
- Pastas: Un espagueti con un toque de aceite de oliva y ajo es un complemento perfecto.
- Arroz: Blanco o integral, ayuda a absorber la deliciosa salsa.
- Ensaladas: Una ensalada fresca con hojas verdes balancea los sabores del plato.